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La noticia dice más o menos así: Un joven en Singapur redactó un mensaje de 160 letras, en ingles, en 41 segundos y medio. Superando la marca anterior por 7 décimas.
En mensaje en cuestion decia “The razor-toothed piranhas of the genera Serrasalmus and Pygocentrus are the most ferocious freshwater fish in the world. In reality, they seldom attack a human”. Para los que no dominan la lengua de la “madre patria”, significa: “Las pirañas de dientes filosos del tipo Serrasalmus y Pygocentrus son los peces de agua fresca más crueles del mundo. En realidad, atacan raramente a un humano”. O sea, lo que todo el mundo suele enviar en un mensaje de texto.
Ya que mandar mensajitos de texto parece ser el deporte del siglo XXI, me dije a mi mismo, mejor empezar ahora, que estamos en una suerte de amateurismo, antes de que llegue la FIFA o en este caso, FISMSA (Federación Internacional del SMS Asociado) y cope todo con sus sponsors.
Tengo que confesar que practiqué arduamente. En un rapto de habilidad, logré escribir un mensaje de 160 letras en 40 segundos. 40 segundos clavados. Esto es lo que escribí: “Adfkeodms fksidmfksdjf skdfnsdk sdjdfjskfielwpdmdc skddnzlciks maslwoqñaa djspqqpej maspqisdnxls klaoqjdbcksjhqoanc akshewkans ksahwiqnsk jfishqoq dkuwiofbsk djdhwkcnskdsnsd”. Si ya sé, el chiste es demasiado fácil. Pero habiendo logrado mi objetivo decidí retirarme con toda la gloria, y evitar una carrera llena de coqueteos con el síndrome del túnel carpiano.
Buenos Aires suele prestarse a eventos de todo tipo y clase. Este sábado 18 de Noviembre, sin dudas será sede de uno, por lo menos, extraño.
Ese día, Buenos Aires se sumará a la movida flash mob, concentraciones de gente en lugares públicos en las que, de repente, se lleva a cabo algo raro o inusual y luego se dispersa rápidamente.
El concepto engloba un montón de eventos sin sentido que se vienen realizando en diferentes ciudades del mundo desde el 2003. Los ejemplos se multiplican, y así como la lucha de almohadas, se organizan guerras de pistolas de agua, desfiles espontáneos, desnudos masivos, etc.
El lugar será el parque frente al Planetario de Buenos Aires, básicamente, los participantes deberán esta en el lugar con una almohada en una bolsa plástica para, cuando den las 18:00, se de la orden y pelear contra quienes ahí estén.
Soy de los que creen que una persona se define como tal, de acuerdo a lo que hace. Y casi en igual medida por lo que hizo. En definitiva, por la serie de acontecimientos por lo que pasó durante su vida.
Ayer, pseudo filosofando con una amiga (en realidad yo filosofaba y ella me aguantaba) caí en la conclusión de la infinidad de personas diferentes que podríamos ser de no haber perdidos ciertos momentos.
Un mensaje que no llegó, un desencuentro en algún lugar, un colectivo que perdiste. Todos, una serie de eventos truncos. Todos recuerdos que no fueron. Puede sonar insignificante el pensar que uno sería diametralmente diferente solo por haber tomado un determinado colectivo. O haber recibido un mensaje de texto que terminó perdido en el éter. Pero mirándolo en perspectiva y sumando todas las cosas que “no fueron”, se me ocurre que la diferencia con mi yo actual sería, al menos, sensiblemente distinta.
Desde luego se puede, también, recurrir a la teoría del destino. Que las cosas pasan o no por obra y gracia del él. Pero ese ya es otro tema.
La noticia dice más o menos así: Un joven en Singapur redactó un mensaje de 160 letras, en ingles, en 41 segundos y medio. Superando la marca anterior por 7 décimas.
